20 plantas de interior

  • Aecmea (Aechmea fasciata)



    Cada roseta florece sólo una vez y se marchita y muere lentamente, dando antes dos o tres rosetas que la sustituirán. La roseta central debe tener 2,5 cm de agua y cambiarse cada 2 semanas. Utilizar preferentemente agua de lluvia.


  • Afelandra (Aphelandra squarrosa)



    Para que se produzca la floración requieren una buena luminosidad, pero se debe evitar la radiación directa. No permita que la tierra se seque nunca. Riegos copiosos en verano y más limitados tras la floración. Pulverizar el follaje de vez en cuando.

  • Alocasia, Oreja de elefante (Alocasia macrorrhiza)



    Para que esta planta se desarrolle plenamente, debe buscarse un emplazamiento orientado al este, donde reciba luz solar directa. Si, por el contrario, queremos que su tamaño no sea excesivo, la colocaremos en una zona sombreada.


  • Areca (Dypsis lutescens = Chrysalidocarpus lutescens)



    Areca es una palmera muy común en los interiores. Mucha luz; poner cerca de la ventana. Gusta de una atmósfera húmeda. Regar en verano 2 veces por semana y en invierno cada 10 ó 12 días. Abonado 1 vez al mes con un fertilizante completo, exceptuando el invierno.

  • Begonia rex (Begonia rex)



    Necesita abundante humedad en el aire, pero jamás pulverices las hojas. Para eso rodea la maceta con turba húmeda o colócala en una bandeja con piedritas mojadas. Regar con cuidado sin mojar sus hojas. El exceso de humedad en invierno pudre los tallos.

  • Columnea (Columnea hirta)



    Procura no cambiarlas de sitio, particularmente durante el periodo de floración. Podar la planta tras la floración, ya que las flores saldrán de los tallos nuevos. Para que florezcan bien en la siguiente temporada, deben dejarse descansar a una temperatura de 12 a 15º C y limitando los riegos tras la floración, durante el invierno.

  • Drácena (Dracaena marginata)



    Necesitan de una buena iluminación, pero evitando el sol directo porque son muy propensas a quemarse sus hojas. Regar con frecuencia en verano, mantener el substrato húmedo, no así en invierno donde es preferible mantener la tierra seca. Abonar en tiempo de crecimiento; no hacerlo en época invernal.

  • Esparraguera (Asparagus plumosus)



    Cortar las ramas más largas para conservar la planta más compacta. En verano la tierra debe estar siempre húmeda. Se desarrollan mejor en macetas pequeñas; esperar que las raíces salgan por el fondo antes de cambiar. Si caen hojas secas, probablemente esté el substrato demasiado seco.

  • Esquenanto (Aeschynanthus lobbianus)



    Para favorecer la floración, respetar un periodo de reposo de 4-5 semanas a temperatura más baja (unos 15ºC) y riegos más espaciados (sólo cuando se haya secado la capa superior del substrato, comprobar con los dedos).

  • Ficus benjamina (Ficus benjamina)



    Puede tirar hojas hasta adaptarse a su nuevo emplazamiento. La caída de hojas también puede ser por falta o por exceso de riego o caídas de hojas naturales, normales. Buena luz cerca de una ventana. Riega una media de 2 veces a la semana en verano y cada 10 días en invierno; un poco más si está en una habitación caliente.

  • Filodendro trepador (Philodendron scandens)



    Riego abundante. Rociado frecuente, varias veces a la semana si el ambiente es cálido y seco. En verano, cada 15 días añadir fertilizante líquido al agua de riego.

  • Fitonia (Fittonia verschaffeltii)



    Regar con abundancia sin dejar agua en el platillo (el follaje amarillea). En verano vaporizar el follaje. Las hojas arrugadas son síntoma de sequedad ambiental. Cortar las puntas de vez en cuando para estimular la ramificación.

  • GoldCrest (Cupressus macrocarpa 'Goldcrest')



    El follaje posee un olor a limón muy característico. Tanta luz como sea posible. Crece mal en habitaciones con calefacción, ubicar en una estancia fresca. Las raíces se pudren fácilmente por exceso de riego. Base de la planta marrón.

  • Guzmania (Guzmania spp.)



    Hay que pulverizarlas frecuentemente y llenarles de agua el embudo central de hojas. Cada ocho o diez días, sumergir la maceta en agua. Les beneficia sacarlas bajo la lluvia cuando llueve.

  • Helecho nido de ave (Asplenium nidus)



    No soporta los ambientes excesivamente secos. Si se cultiva en interior, es importante crear una atmósfera húmeda poniendo la maceta sobre una bandeja con bolas de arcilla húmedas y vaporizando regularmente el follaje.

  • Hipoestes (Hypoestes sanguinolenta)



    Los riegos deben ser frecuentes. El ambiente debe ser húmedo. Se debe pulverizar 1 o 2 veces al día. Abonar 1 vez cada 15 días en primavera. Con el tiempo va adquiriendo un aspecto desgarbado que solo podremos remediar mediante podas sistemáticas.

  • Jazmín de Madagascar (Stephanotis floribunda)



    Bastante luz. La calefacción es perjudicial porque seca el aire. Para que la floración se produzca en abundancia, la planta deberá pasar un periodo de descanso en otoño e invierno (menos luz, en un lugar fresco, sin calefacción, poco riego y nada de abono).

  • Kalanchoe o Calanchoe (Kalanchoe blossfeldiana)



    Es muy sensible al exceso de agua; este es su punto débil. La mayoría de las personas no logran que vuelva a florecer y es habitual desecharlas una vez acabada su floración. Si la conservas en un cuarto de estar y regada con regularidad, se desarrollará bien pero no florecerá. Para que se produzca floración, ha de pasar el invierno en un sitio fresco (temperatura mínima de 10ºC) y con muy poquita agua. Trasplántala en primavera a un compost rico y aumenta paulatinamente el riego. Lleva a un sitio soleado y florecerá.

  • Kentia (Howea forsteriana)



    Es la palmera que más se usa para interiores junto a la Areca y a la Chamaedorea. as puntas marrones puede ser por un ambiente seco. Riego en verano 2 veces por semana y 2 veces al mes en invierno. Es una planta delicada al trasplante. Si la trasplantas, cuidado con el cepellón, que no se rompa, lo acusaría mucho o podría morir. La cochinilla algodonosa y araña roja son las plagas más comunes en interior.

  • Poto (Epipremmum aureum)



    Con poca luz pierde el color amarillo del variegado de las hojas. El poto teme mucho el frío; la temperatura nunca ha de bajar de 10ºC. Cuidado con regar más de la cuenta porque se pudre. Crece mucho, por tanto, abono regular.



Plantas de interior (especies)


  1. Afelandra


  2. Aglaonema


  3. Anturio


  4. Aralia


  5. Ardisia


  6. Caladio


  7. Calatea


  8. Cheflera


  9. Ciclamen


  10. Clivia


  11. Columnea


  12. Croton


  13. Ctenanthe


  14. Episcia


  15. Fitonia


  16. Hypoestes


  17. Ixora


  18. Maranta


  19. Nertera


  20. Peperomia


  21. Pilea


  22. Polyscias


  23. Potos


  24. Singonio