Drenaje del suelo y cómo mejorarlo
¿Qué
es el drenaje de un suelo?
Su
mayor o menor rapidez o facilidad para evacuar
el agua
por escurrimiento superficial y por infiltración
profunda.
¿Cómo
saber si el drenaje es bueno o malo?
1. Si tras una lluvia o riego copioso se forman
charcos en el suelo que permanecen varios días,
es síntoma de mal drenaje.
2.
O haz esta prueba: cava un hoyo de unos 60 cm de
diámetro y 60 cm de profundidad y llénalo
de agua. Si queda un poco de agua en el fondo después
de algunos días, es que el drenaje es deficiente. 3.
Los técnicos, viendo los horizontes del suelo,
también lo saben. Se abre un agujero o perfil
y si a unos 50 cm. de profundidad o más,
la tierra tiene un color gris, verde
o gris con manchas rojas, es señal
de que esa zona del suelo permanece saturada de
agua parte del año.
En
la fotografía de la izquierda se aprecia
una "masilla" de color gris bastante
impermeable.
¿Cuál
es el problema del mal drenaje?
Las plantas,
ya sean árboles, arbustos, flores, hortalizas
o césped, lo pasan mal porque las raíces
se asfixian y los hongos que viven en
el suelo (Phytophthora,
Armillaria, Fusarium, Pythium, Rhizoctonia,
etc.) aprovechan la situación para infectarlas
y "rematarlas".
Cierto
es que hay especies vegetales que son más resistentes
que otras al exceso de agua, hasta el punto que hay
un grupo de Plantas Acuáticas que permanecen
con las raíces permanentemente inundadas.
¿Cuándo
hay más riesgo de problemas de drenaje?
Si el suelo es arcilloso, más riesgo que
si es arenoso. Aunque no todos los suelos arcillosos
drenan mal.
En áreas planas o cóncavas
del terreno.
Al pie de pendientes, que es donde llega toda
el agua de escorrentía.
Un jardín cerrado por paredes o que carezca
de una salida natural del agua por superficie puede
acumular más agua de lo conveniente.
¿Cómo
se mejora el drenaje?
Si el
drenaje es realmente malo lo mejor será instalar
una red de tuberías de drenaje. Si no es para
tanto, realizando algunas operaciones de las que siguen
será suficiente.
1. Crea pendientes
Moldea
el terreno dando pendientes suaves al terreno para que
escurra el agua hacia un lado y salga por allí
o bien se recoja con una canaleta. Hay que "guiar"
al agua de lluvia y riego hacia donde nos interese dando
pendientes adecuadas. Esta labor es fundamental al construir
el jardín.
2. Nivelación
Nivela
el terreno con el fin de suprimir las ondonadas o depresiones
que acumulen agua.
Pendientes
y nivelando
3. Canaletas o
zanjas
Coloca
una canaleta o zanja al pie de una pendiente.
4. Haz caballones o camellones
Planta
en altura
Consiste
en crear pequeñas lomas o montículos de
tierra y plantar sobre ellos; así se acumulará
menos agua al pie de los ejemplares en el caso de suelos
con mal drenaje. Por ejemplo, en plantaciones frutales
se disponen sobre una especie de plataforma o lomos
anchos y bajos separados por surcos poco profundos que
corren por el medio de la calle. Incluso se puede poner
un césped sobreelevado.
5. Instala tubos de drenaje
Tubos
de drenaje
Es el
sistema más eficaz. Hay que evaluar si es necesaria
la instalación de tubos o no. Muchas veces, con
pequeñas mejoras es suficiente para solventar
el drenaje. Sin embargo, si el drenaje está claramente
impedido, no queda mejor solución que esta, acompañada
de todas las demás medidas.
Espina
de pescado y en paralelo
Los pasos para instalar un drenaje son:
- Traza sobre el terreno las líneas con cal o yeso por donde discurrirán las tuberías. La disposición clásica es en "espina de pescado" donde hay un tubo principal, central o en un lateral al que se conectan los ramales. Las zanjas laterales deben unirse a la principal en un ángulo de 60° y estar separadas entre ellas 2 ó 3 metros. (Mira el dibujo superior)
Geotextil
- Cava zanjas de unos 50 cm. de profundidad y 40 cm. de anchura. Todos los tubos deben descansar con una ligera pendiente para que pueda correr el agua.
- Deposita en el fondo de las zanjas una capa de 8-10 cm. de espesor de grava o de chinos.
- Sobre la grava pon los tubos especiales para drenaje. Son corrugados y poseen múltiples agujeritos.
- Echa otra capa de grava sobre dichos tubos de 20-25 cm. de espesor y extiende sobre la capa de grava una tela geotextil. Esta tela tiene la finalidad de hacer de filtro, es decir, dejar pasar el agua pero no la tierra porque terminaría colmatando la grava.
- Finalmente
completas con tierra (25-30 cm.), a poder ser,
mezclada con arena.
6. Drenes verticales
En el
campo se usa a veces este sistema que consiste en abrir
hoyos o pozos que llegan hasta un estrato poroso del
subsuelo al que va a parar el agua de drenaje. Algunas
veces se lo designa "pozo de drenaje o de infiltración".
7.
Elección de especies
Para
un suelo arcilloso o con mal drenaje limítate
preferiblemente a especies que resisten mejor estas
condiciones asfixiantes. Todas las de estas listas te
servirán:
* Las
resistentes a suelos arcillosos.
* Las
que se plantan en los bordes de estanques.
* Las
que se plantan en las proximidades a estanques.
8.
Laboreo
Labra a conciencia el terreno antes de plantar o sembrar
en profundidad (30-40 cm.). En el caso de jardines grandes
es recomendable hacer una labor agrícola que consiste
en dar 1 ó 2 pases de subsolador o de arado-topo.
Estos aperos van incorporados a un tractor y se caracterizan
porque rompen hasta 50 cm. la masa del suelo (subsolador)
y dejan un tunelillo hueco (arado-topo).
9. Aporta arena y materia orgánica al suelo
En el
momento de plantar, aporta una buena cantidad de mantillo,
compost, turba o estiércol para esponjar
el suelo y airearlo. Si además le echas arena
de río, mezclándolo todo bien, mucho mejor.
Arena y materia orgánica
Una enmienda de arena en toda la superficie, por
ejemplo, para césped, puede ser de unos 2 ó
3 metros cúbicos por cada 100 m2 de superficie.
Cuanta más, mejor, no hay problema en pasarse.
Piensa que los céspedes de campos de fútbol
están casi sobre arena pura. La mejor arena es
la de río, lavada y gruesa.
La materia
orgánica (estiércol, mantillo, turba,
etc.) esponja, airea, da una buena estructura al suelo
y mejora la infiltración de agua. Si el suelo
es pobre se pueden aportar 100 kilos por cada 100 m2
de turba negra o mantillo ó 300 kilos por cada
100 m2 de estiércol.
10. Control del riego
En suelos
que se encharcan fácilmente riega menos
porque significa que retienen bastante agua, no es un
"suelo seco", como los arenosos. Pasarse con
el riego en estos suelos, es fácil.
11.
Céspedes ya implantados
Foto: máquina escarificadora
Es muy importante
eliminar periódicamente lo que se llama el fieltro.
Consiste en capa fina de 1, 2 ó 3 cm. que se
forma en la superficie del suelo con los restos de hierba
y raíces y se hace impermeable, dificultando
mucho que pase el agua y el aire hacia abajo. Se elimina
haciendo ESCARIFICADOS (mínimo 1 al año,
en primavera, ideal, otro más en otoño).
Aparte
del fieltro, el mismo pisoteo (niños, perros,
reuniones, etc.) va compactando el suelo. Un suelo
compactado tiene un mal drenaje. Para mejorar la
compactación es muy bueno PINCHAR el suelo.
Se puede hacer con una horca en superficies pequeñas,
con un rulo de púas o con una máquina
profesional llamada "sacabocados", a efectuar
por empresa que la tenga. Hazlo todos los años
1 ó 2 veces y receba con una mezcla de arena
y turba mitad y mitad a razón de 1,5 m3 de mezcla
por cada 100 m2 tras la labor de pinchado.
Si
lo deseas, puedes ver más sobre el escarificado
y aireado del césped aquí.
12.
Bombas de achique
En
caso de encharcamiento, se pueden usar bombas eléctricas
pequeñas "de mano" para aliviar los
posibles charcos o lagunas.
Pues
estas son las operaciones para mejorar un drenaje. Estudia
tu caso y aplica las medidas correctoras que sean necesarias.