Humus




  • ¿Qué es el humus?

    El humus es una sustancia que se produce por la descomposición en el suelo de restos orgánicos.

    Ejemplo: cuando cae una hoja al suelo es atacada por hongos y bacterias y una parte de esa hoja se convierte en humus. Ocurre igual con el estiércol, compost, turba y cualquier material orgánico: son atacados por los microorganismos y se forma humus.

    Con los años, el humus también se descomponerá y transformará en minerales, pero lentamente; desaparecerá como humus después de más de 3 años.


  • ¿Qué beneficios produce el humus?

    El humus es una sustancia muy especial y beneficiosa para el suelo y para la planta:

    Agrega las partículas y esponja el suelo, lo airea; por tanto, mejora su estructura.

    Retiene agua y nutrientes minerales y así no se lavan y pierden en profundidad.

    Aporta nutrientes minerales lentamente para las plantas a medida que se descompone (Nitrógeno, Fósforo, Potasio, Magnesio, etc.).

    El humus produce activadores del crecimiento que las plantas pueden absorber y favorece la nutrición y resistencia: vitaminas, reguladores de crecimiento (auxinas, giberelinas, citoquinicas) y sustancias con propiedades de antibióticos.

    Las raíces se encuentran mejor en un suelo rico en humus que en uno pobre en esta sustancia.

  • ¿Cómo saber la cantidad de humus que tiene el suelo?

    El método preciso es llevando una muestra de suelo a analizar a un laboratorio. Se determina el valor exacto. Por ejemplo: "Este suelo tiene un 1,7% de humus" (materia orgánica). Quiere decir que por cada 100 kilos de tierra, hay 1,7 kilos de humus.

    La mayoría de los suelos cultivados tienen entre un 1 y un 3% de humus. La arena de la playa es muy pobre en humus, no llega al 1%, pero el suelo de un bosque puede superar el 5% de humus.

    Si sale un valor muy bajo es más que recomendable hacer un plan de mejora para aumentarlo, mediante, por ejemplo, fuertes estercoladuras durante varios años seguidos.

  • ¿Cómo aumentar el humus del suelo?

    Aportando al suelo abonos orgánicos: estiércol, compost, turba, guano, humus de lombriz, etc.



    Exige tiempo; de la noche a la mañana no se puede pasar de un 1% de humus al 2%; se consigue a lo largo de una serie de años.

    Más o menos el 10% del estiércol que se echa se convierte en humus. Es decir, que si echas 10 kilos de estiércol al suelo, obtienes 1 kilo de humus.

    Hay plantas que gustan de un suelo rico en materia orgánica; otras normal y otras que, incluso, prefieren un suelo pobre en humus, por ejemplo, la vegetación del desierto.

  • ¿Cuándo aportar el abono orgánico?

    En invierno es el mejor momento para aportar abonos orgánicos al suelo, los cuales producirán humus y nutrientes para las plantas (Nitrógeno, Potasio, Azufre, etc.).

  • ¿Se puede abonar sólo con abonos orgánicos?

    Sí, podrías abonar sólo con abonos orgánicos, es lo que se suele hacer en las huertas tradicionales, pero...

    Sale más caro que los fertilizantes químicos.

    En determinados momentos hacen falta grandes cantidades de nitrógeno y de los demás elementos y los abonos orgánicos no pueden suministrarlo ya que ellos van descomponiéndose lentamente, según el clima y el tipo de suelo.

    Si hay carencias de micronutrientes, por ejemplo, de hierro, la manera más fácil de corregirla es con fertilizantes minerales, por ejemplo, con quelatos de hierro.

    Los abonos químicos o minerales lo único que aportan son nutrientes puro y duro, ni humus ni mejora del suelo en otros aspectos como hacen los abonos orgánicos. Eso sí, enriquecen de minerales el suelo y las plantas disponen de alimento en cantidad, pero nada más.