18 Plantas de interior

Aecmea (Aechmea fasciata)

  • Necesitan un interior que sea cálido y con buena luz.

  • Humedad: resiste bien la sequedad del aire, así como los lugares mal ventilados y con humos.

  • Riego: moderado. Utiliza agua blanda (no caliza), agua de lluvia, descalcificada o acidificada.

  • Se riegan echando agua en el cogollo y las axilas de las hojas que es como la captan en su hábitat natural. Cambia esta agua 2 ó 3 veces al mes. Si riegas en el compost, cuidado con pasarte, porque se pudre fácilmente.

  • Sensible al ataque de pulgón y cochinilla. Rocía la planta con una mezcla de agua y jabón para combatir el primero y elimina la cochinilla con ayuda de un algodón empapado en alcohol de quemar.

  • ¿Podredumbre en la base de la roseta? Exceso de agua. Vacía el embudo si tiene agua y deja secar el compost.

  • ¿Hojas arrugadas y secas? Ambiente seco. Pulveriza con regularidad.

  • Una vez que termina de florecer, las plantas mueren, pero pueden multiplicarse extrayendo con raíces los hijuelos que salen en la base. El problema es que tardan años en emitir flores.


    Afelandra (Aphelandra squarrosa)

  • No es fácil de cultivar.

  • Gusta de temperatura alta.

  • Atmósfera húmeda. Por lo que si la pones cerca del radiador tendrás que pulverizar sus hojas bastante, o bien, dejarla sobre un cuenco o plato con guijarros mojados para que no le falte nunca humedad en el aire.

  • Riego: en general, 2 riegos a la semana todo el año menos durante el invierno, que se reduce a uno cada 7 ó 10 días, según esté de fuerte la calefacción.

  • Abono cada 15 días.

  • Necesita un descanso invernal. Cuando se pase la flor, córtala y dale un descanso a la planta de 1 mes a base de menos agua, menos temperatura y nada de abono.

    Alegría de la casa, Balsamina (Impatiens walleriana)

  • Se utiliza tanto en exterior (en sombra) como en el interior de la casa. Hoy terminan en el cubo de la basura cuando comiencen a flojear. Es barata y se trata como una planta de temporada.

  • Luz: cuidado con la falta de luz en interior, perderá las flores aún en capullo. En verano, exterior sombra. Colócala en un sitio con luz, no sol directo.

  • Humedad: evita las pulverizaciones sobre hojas y flores situándola mejor sobre una bandeja de guijarros mojados.

  • Abono: 1 vez al mes durante la floración con un fertilizante líquido disuelto en el agua de riego.

  • Despuntes: para que esté más densa, corta la punta de los tallos jóvenes en primavera. Con este recorte también se estimula la floración.

  • Multiplicación: aprovecha estos recortes para hacer esquejes y propagar la planta. Enraízan muy bien introducido su extremo en un vaso o recipiente con agua; o bien, en compost. En este último caso, imprégnalos antes con hormonas de enraizamiento (polvo blanco).

    Araucaria (Araucaria heterophylla)

  • La Araucaria es un árbol que se puede cultivar en el jardín exterior o en el interior de las casas.

  • Luz: un lugar con tanta luz como sea posible, por ejemplo cerca de una ventana. Para que no se incline hacia la luz, dale vueltas de vez en cuando.

  • Temperatura: son fatales las temperaturas altas de la calefacción. Si puedes, que no viva con calefacción, sino en una habitación más fresca en invierno. Interior fresco.

  • Humedad: necesita una atmósfera húmeda en el interior. Pulveriza 2 veces por semana en verano y 1 vez en invierno si hay calefacción. El ambiente seco provocará que las ramas inferiores amarilleen y caigan.

  • Riego: 2 veces por semana en verano y en invierno cada 7-10 días.

  • Abono: aporta un poco de fertilizante líquido diluido en agua de la regadera cada 15 días en el período de crecimiento (primavera y verano).

  • Cambio de maceta: cuando la Araucaria es pequeña se le cambia a una maceta una medida mayor cada año pero cuando mida 1 metro de altura, ya no es necesario trasplantarla. Limítate a renovar cada temporada los 3 centímetros superiores del sustrato por otro nuevo y fresco.

  • Es normal que con los años se vayan secando las ramas bajas, pero para que ocurra lo más tarde posible, pulveriza con agua de vez en cuando y no dejes que el compost se seque totalmente.

    Begonia de flor (Begonia elatior e híbridos)

  • Luz: necesita luz pero el sol la puede quemar.

  • Riego: mantén el sustrato siempre húmedo, no encharcado. Su mayor problema es por pudrición de los tallos al pasarse con el riego. Para prevenirlos, riega siempre por abajo, es decir, poniendo la maceta sobre un platito con agua durante un rato y luego retira el agua.

  • No la cambies de posición durante la floración porque se pueden caer los capullos.

    Buganvilla (Bouganvillea glabra)

  • También se usa en interiores.

  • Luz: necesita mucha luz, si no, pierde las hojas y no llegarán a florecer el verano siguiente. Cultívala en una habitación soleada.

  • Temperatura: en las regiones con heladas hay que protegerla en invierno. Si se queda pelada, llévala a un lugar más fresco y proporciónale más humedad. Saca la planta al exterior en verano y métela en octubre, en un lugar fresco.

  • Humedad: rocía el follaje de vez en cuando.

  • Riega en 2 ó 3 veces a la semana en primavera y verano. En otoño, con 1 riego semanal es suficiente. En invierno sólo cuando la tierra esté seca.

  • Abono: añade un poco de fertilizante líquido al agua de riego en primavera y verano cada 15 días. Estimularás la floración si hacia la mitad del verano reduces el riego y el abono. Otoño: deja de abonar.

  • Si no florece puede ser por falta de luz, una mala ventilación o un exceso de riego. Lo mejor es procurar mantenerla siempre en un emplazamiento lo más iluminado posible y bien aireado.

  • Es normal que pierda hojas en invierno y en otoño porque la planta descansa. Si la tienes en interior, puedes llevarla a una habitación más cálida para evitarlo.

  • Poda a finales de invierno para limitar su tamaño y estimular un desarrollo más frondoso y compacto de cara a la primavera. Corta los extremos de forma que quedan sólo de 5 a 7 centímetros de brote nuevo del año sobre el tallo principal. Haz los cortes siempre por encima de una hoja o yema.

  • Cambia a una maceta un poco mayor cada año.

    Cala (Zantedeschia aethiopica)

  • Temperatura: puede soportar unos cuantos grados bajo cero. Si está en maceta, es mejor no correr riesgos y meterla dentro en cuanto surja la 1ª helada. En climas cálidos (por ejemplo, Mediterráneo) puede cultivarse en invierno al exterior todo el año.

  • Riego: la Cala se riega bastante cuando está en crecimiento y en floración, pero después de florecer debes mantenerla completamente seca, es su periodo de reposo. Entonces las hojas se pueden marchitar y es algo normal. Aplica poco a poco más agua cuando aparezca el follaje.

  • Abono: cada 15 días en floración con fertilizante líquido.

    Clivia (Clivia miniata)

  • Su cultivo es bastante sencillo y vive muchos años.

  • Riego: es planta de poco riego y se pudren las raíces por regar más de la cuenta. Comprueba que no esté obstruido el agujero de drenaje de la maceta.

  • Abono: abona cada 15 días desde marzo a septiembre con un poco de fertilizante líquido disuelto en la regadera.

  • Cambio de maceta: el cambio a una maceta de mayor tamaño no es necesario hacerlo cada año, sino cada 3 ó 4 años. Conviene que tenga las raíces comprimidas, ajustadas a la maceta, a diferencia de la mayoría de plantas quiere macetas pequeñas; así florecerá mejor.

  • Poda: corta la flor cuando se seque para que no se forme el fruto y consuma las reservas del bulbo. Si ocurriera ésto, el próximo año la floración sería más pobre.

  • Plagas: la plaga más frecuente es la Cochinilla algodonosa, que suele atacar a la base de las hojas. Quítalas con un algodón impregnado en alcohol metílico o usa productos químicos.

  • Para que vuelva a florecer año tras año necesita pasar un período de reposo en invierno. Es decir, durante esos meses, debes mantener la Clivia en un lugar fresco (sin calefacción, entre 8 y 15ºC) y prácticamente sin riego. A finales de invierno, cuando salga la vara floral, da por concluido el reposo y vuelve a regarla de forma gradual hasta el verano, ya sí necesita más agua.

    Ficus benjamina (Ficus benjamina)

  • Luz: mucha luz. En sitios con poca iluminación puede perder las hojas.

  • Riego: no más de 2 veces por semana en verano, y una vez cada 8 ó 10 días en invierno. Cuidado con regar en exceso.

  • Abono: echa cada 15 días en primavera y verano un fertilizante líquido. Aporta Hierro al agua 1 vez al mes, así evitarás un posible amarilleo de las hojas.

  • Trasplanta a una maceta un poco mayor cada año, en primavera. Si es una planta demasiado grande para manipularla con facilidad, sustituye anualmente sólo la capa superior del sustrato (un par de centímetros) por otro nuevo.

  • Causas de caída de hojas en Ficus benjamina:

    - Cuando se compra un ejemplar y hasta que se aclimata a su nueva casa.
    - Por cambiar el ficus de sitio.
    - Si está puesto en un sitio con poca luz.
    - Si está puesto en un sitio demasiado frío o baja de golpe la temperatura.
    - También puede tirar hojas por falta de agua y por lo contrario, por exceso.
    - Ten en cuenta también que la planta pierde hojas de forma natural en primavera cuando crecen las nuevas.

    Flor de cera (Hoya carnosa)

  • Luz: es vital que disponga de buena luz, si no, no florecerá. Lo ideal es ponerla cerca de una ventana orientada al sur o al este. Si recibe el sol directo de la mañana, digamos hasta las 11:00 es bueno para la floración.

  • Riego: durante el periodo de más crecimiento de primavera y verano necesita su riego regular, pero en otoño e invierno, redúcelo dejando secar el sustrato entre riego y riego; las hojas carnosas tienen reservas.

  • Cambio de maceta: con cambiar cada 2 ó 3 años a un tiesto un poco mayor, es suficiente. Le pasa como a la Clivia que hasta que las raíces no llenan y se aprietan un poco en la maceta, no florecen.

  • ¿Caída de capullos?

    - Corriente fría de aire.
    - Por mover la planta de sitio.
    - Por calor excesivo o por pasar sed.

  • ¿No florece?

    - Falta de luz.
    - Falta de nutrientes minerales.
    - Humedad ambiental muy baja, sequedad.
    - Maceta demasiado grande.

  • ¿Hoja amarillas y puntas negras?

    - Exceso de riego.
    - Falta de Nitrógeno.

    Hortensia (Hydrangea macrophylla)

  • Las Hortensias que venden para interior, son Hortensias "semiartificiales", por tanto, una vez terminada la floración no se debe mantener en casa, sino podarla dejando 3 yemas por rama y situarla en el exterior-sombra, en tierra ácida (de brezo, de castaño, etc.).

  • Las plantas se desarrollan mejor en un ambiente fresco y bastante húmedo.

  • El tiempo que esté en casa se debe:

    - Poner en un sitio luminoso.
    - Pulverizar las hojas con agua blanda (sin cal).
    - Regar casi a diario.
    - Durante el crecimiento añade abono 1 ó 2 veces al mes.
    - Entutorar para que no pueden troncharse los tallos por el peso de las cabezas de flor.

    Kentia (Howea forsteriana)

  • No la pongas cerca de radiadores ni expuesta a corrientes de aire frío. Pulveriza con agua las hojas en invierno.

  • Las puntas marrones puede ser por un ambiente seco.

  • Su peor enemigo: el encharcamiento, sobre todo en invierno. Sin embargo, en verano, no debes dejar que se seque el cepellón.

  • Si la trasplantas, cuidado con el cepellón, que no se rompa, lo acusaría mucho o podría morir, sensible a la alteración de sus raíces.

    Nefrolepis (Nephrolepis exaltata)

  • Peligro con las calefacciones en invierno y la sequedad del verano.

  • Pulveriza el follaje con frecuencia para que este helecho disfrute de la humedad que tanto le gusta. En el cuarto de baño hay humedad; ahí va bien.

  • Riega siempre por abajo, colocando la maceta un rato sobre un plato con agua. De esta forma, evitarás que se moje el cogollo y se pudra.

  • Las corrientes de aire se perjudicial.

  • En caso de que haya perdido muchas hojas, puedes cortar a ras de tierra y rebrotará.

    Perejil (Petroselinum crispum)

  • Dura más de una temporada pero es conveniente que la renueves cada año.

  • Los abonos minerales lo hacen crecer con vigor dando una buena cosecha de hojas.

  • Se obtiene con facilidad por medio de semillas que se siembran en primavera o verano y así tener perejil fresco durante todo el invierno. Las semillas tardan en germinar, 1 mes. Si quieres que germinen antes, ponlas antes de sembrar en remojo toda una noche con agua templada.

    Potos (Epipremnum aureum)

  • Los Potos son frioleros. La temperatura no debe de bajar de 10ºC.

  • Es aconsejable pulverizar la planta con frecuencia, tanto en verano como en invierno.

  • No soporta el exceso de agua. Cuidado con pasarse con el riego. En invierno regar muy poco.

  • Despunta las ramas todos los años en primavera para que la planta se haga más densa.

  • Abono regular porque crece mucho.

  • Se multiplica fácilmente por esquejes. Toma esquejes de tallo que lleven una yema y una porción de raíz aerea en cualquier época del año. El enraizamiento es muy fácil, tanto en sustrato como introducidos en un vaso con agua, pudiendo obtener una planta en pocas semanas.

    Rosal enano

  • Colócalo cerca de una ventana templada y luminosa, pero sin sol directo y ni corrientes de aire.

  • Pon la maceta sobre un plato con gravilla mojada ya que en interior necesita bastante humedad ambiental y que esté alejada de la calefacción.

  • Cuando acabe su floración, llévala al exterior, en semisombra, hasta el final del otoño, que la vuelves a meter en casa.

  • El invierno (que lo pasa en el interior) pódala hasta la mitad de su tamaño y mantenla más bien seca hasta la primavera. Abona al inicio de la primavera.

    Singonio (Syngonium podophyllum)

  • Riego constante porque enseguida acusa la escasez de agua, mostrándose la planta lacia.

  • Agradece una humedad elevada del aire, pero puede crecer bien sin ella.

  • El calor es imprescindible para su buen desarrollo. No lo sometas a temperaturas menores de 15ºC y, a ser posible, mantén constantemente alrededor de los 20ºC, aunque con humedad mayor, llega a tolerar los 25ºC.

  • Soporta mal los cambios bruscos de temperatura.

    Tronco del Brasil, Drácena (Dracaena fragans 'Massageana')

  • La falta de humedad provoca que se sequen las puntas, por lo que conviene pulverizar el follaje frecuentemente.

  • Deja secar la tierra entre riegos, ya que no soporta el encharcamiento continuo.

  • Se reproduce:

    1. Cortando los brotes que aparecen en el tronco y plantándolos en macetas individuales.
    2. Otro método es cortar trozos de tallo en primavera y verano y hacerlos enraizar.
    3. Acodo aéreo en primavera.



Plantas de interior (especies)


  1. Afelandra


  2. Aglaonema


  3. Anturio


  4. Aralia


  5. Ardisia


  6. Caladio


  7. Calatea


  8. Cheflera


  9. Ciclamen


  10. Clivia


  11. Columnea


  12. Croton


  13. Ctenanthe


  14. Episcia


  15. Fitonia


  16. Hypoestes


  17. Ixora


  18. Maranta


  19. Nertera


  20. Peperomia


  21. Pilea


  22. Polyscias


  23. Potos


  24. Singonio