Trastornos o fisiopatías del césped
El
césped puede tener problemas
que no son causados ni por PLAGAS
ni por HONGOS; son los llamados
TRASTORNOS.
1. Sequía
2. Exceso de agua
3. Compactación
del suelo
4. Fieltro
5. Frío
6. Sombra
7. Quemaduras
solares
8. Exceso
de fertilizantes
9. Carencias
de nutrientes (Nitrógeno,
Fósforo, Potasio...)
10. Herbicidas
mal empleados
11. Orines de
perros y gatos
12. Contaminantes
en el suelo
13. Suelo de
mala calidad
14. Salinidad
del agua o del suelo
15. Problemas
de siembra
1.
Sequía
Es
quizás el trastorno más
común. El césped
pasa sed, se seca y queda pajizo.
Riega
con regularidad y comprueba
que los aspersores y/o difusores
cubren perfectamente toda la
superficie; si dejan zonas sin
regar o les cae poca agua habrá
calvas ahí.
2.
Exceso de agua
Por
regar más de la cuenta
o por tener el suelo un mal
drenaje las raíces se
pudren y las hojas se tornan
amarillas. Si el drenaje es
malo, mejóralo aplicando
alguna de las medidas que se
describen en esta página:
"Drenaje
de suelos".
3.
Compactación del suelo
La
compactación del suelo
se produce por el pisoteo y
por el uso frecuente. Se arregla
mediante escarificados
y aireados (pinchados:
foto derecha). Se describen
estas dos labores aquí.
4.
Fieltro
El
fieltro es una capa fina de
1, 2 ó 3 cm. que se forma
en la superficie del suelo con
los restos a medio descomponer
de raíces y hojas. Se
puede apreciar en esta imagen
ese "colchón"
entre la hierba y el suelo.
Es
perjudicial en tanto que impide
el paso del agua, el aire y
los abonos. Es preciso eliminarlo
con escarificados.
5.
Sombra
Si
el césped está
en sombra y no es una mezcla
adecuada para sombra, los tallos
crecerán finos, tiernos,
pálidos, amarillentos
y terminarán secándose.
Las que mejor soportan la sombra
son las Festucas y Zoysia
japonica, esta última
para clima cálido. El
Cynodon (Bermuda o Grama)
va fatal en sombra.
6.
Frío
Césped
en invierno
Las
especies de clima cálido
(Cynodon, Kykuyu, Gramón,
Paspalum y Zoysia) se vuelven
marrones debido a las heladas
(temperatura menor a 0ºC).
Puede que no mueran y rebroten
en primavera. Por tanto, en
climas con heladas no se deben
sembrar ninguna de las citadas.
En
los climas templados o cálidos,
sin llegar a ese amarronamiento
generalizado, también
es normal que presenten un aspecto
desmejorado, más feo
durante el invierno.
7.
Quemaduras solares
Tras
una siega muy baja, el cuello
a ras de suelo queda al aire
blanquecino por falta de luz
y se puede quemar con los rayos
del sol.
Otra
posibilidad de quemaduras es
por el "efecto lupa":
gotas de agua sobre las hojas
combinado con el efecto del
sol. La situación más
propicia es sol fuerte sobre
especies de césped de
sombra al sol. Riega al amanecer,
no en pleno día.
8.
Exceso de fertilizantes
Quemaduras
En
concreto es el exceso de Nitrógeno
(N), porque los demás
nutrientes, como Fósforo
(P), Potasio (K), Magnesio (Mg),
etc. es muy raro que sean perjudiciales,
ya que harían falta grandes
cantidades de abono.
El Nitrógeno (N) en
alta concentración en el
suelo provoca:
Quemaduras en las hojas.
Hay que segar más porque
el crecimiento es mayor.
La hierba es más tierna,
tiene más agua, lo que
la hace más propensa
a plagas, hongos, sequía
y frío.
Se forma mucho fieltro.
Consejos:
- Aporta las dosis aconsejadas. (Ver "¿cómo abonar el césped?").
- Reparte el abono lo más uniformemente posible para que no haya acumulaciones puntuales.
- Es muy importante regar inmediatamente después de abonar para disolverlo.
- Los nitratos, por ejemplo, el Nitrato amónico, son los más peligrosos en este aspecto, puesto que es Nitrógeno muy soluble y nada más aportarlo, al mojarse, se disuelve creando una alta concentración entorno a las raíces.
-
También quema la excesiva
materia orgánica (estiércol,
mantillo, compost) o si es
un estiércol poco descompuesto.
9. Carencias de nutrientes (Nitrógeno, Fósforo, Potasio...)
Nitrógeno (N)
Carencia de Nitrógeno
La hierba crece poco.
Las hojas presentan un color verde pálido en las hojas tirando a amarillo.
Se invade de trébol y otras malezas poco exigentes en Nitrógeno. Estos mismos síntomas también pueden producirlos Nematodos, exceso de riego, otras carencias, etc. por lo que no es fácil el diagnóstico.
Fósforo (P)
El Césped crece poco (igual que pasa con el Nitrógeno).
Las hojas se vuelven de un verde más oscuro y las puntas amarillean y se secan.
También las hojas se ondulan de una manera típica y, a veces, aparece una pigmentación purpúrea.
Potasio (K)
Las puntas y los bordes de las hojas amarillean y luego se secan.
Magnesio (Mg), Azufre (S) e Hierro (Fe)
Son otros elementos que cuando escasean en el suelo también producen amarilleamientos en el Césped. Son carencias difíciles de diagnosticar. Para eso están los análisis de suelo y los análisis de hojas en laboratorio.
En los suelos arenosos puede haber más deficiencias porque los nutrientes son más fácilmente lavados.
En suelos con mucha cal, calizos, también pueden escasear varios elementos como el Hierro, el Zinc, el Manganeso, el Potasio, el Fósforo debido a que están bastante insolubles, es decir como mineral, no disuelto con el agua y por tanto, no absorbibles por las raíces.
Consejos:
- Para evitar estos problemas de carencias, abona todos los años con un fertilizante equilibrado N-P-K, o sea, que incluya Nitrógeno, Fósforo y Potasio.
- Si se presentan carencias de Nitrógeno, Fósforo, Potasio o de cualquier otro elemento, usa fertilizantes que los contengan para corregirlas.
- Los
micronutrientes (Hierro, Cobre,
Manganeso, Boro, Molibdeno
y Zinc) se corrigen mediante
la adición de unos
fertilizantes especiales llamados
quelatos, aplicados a las
hojas o al suelo. Los quelatos
tienen la propiedad de que
no se insolubilizan en suelos
calizos, causa frecuente de
su carencia natural.
- También
es muy recomendable acidificar
los suelos fuertemente calizos
(pH muy alto, mayor de 8)
previamente a la siembra.
Se consigue haciendo una enmienda
de azufre en polvo con el
fin de bajar el pH. Esto provoca
que se liberen elementos del
suelo y queden disponibles
para las raíces.
10. Herbicidas mal empleados
Si usas herbicida en el césped, asegúrate que no le afectará negativamente. En la etiqueta indica para qué está indicado su uso. Por ejemplo, el Glifosato es un herbicida total que jamás se debe aplicar al césped para matar malas hierbas porque lo mataría todo, césped y malezas. Otras veces, se aplica el Glifosato a las malas hierbas de los márgenes y el viento lo transporta a la pradera por deriva, dañándola seriamente.
No apliques cuando haya aire.
Limpia muy bien la mochila para eliminar residuos que pudieran afectar a otras plantas.
Emplea la dosis indicada por el fabricante, no vale dosificar 'a ojo'.
Si tratas cuando hace mucho calor hay riesgo de quemaduras; lo mejor es hacerlo al amanecer o al atardecer.
11. Orines de perros y gatos
Orines
Producen alrededor de la mancha amarilla un anillo verde más intenso y la hierba crece más en dicho anillo.
12. Contaminantes
Vertidos de aceites, aguas con detergente, lejía... cualquier producto tóxico derramado.
13. Suelo de mala calidad
Si el suelo tiene piedras debajo, rellenos de obra, cemento, etc. amarillea y crece poco. Es importante conocer siempre qué hay debajo.
14. Salinidad del agua o del suelo
El riego con agua salina provoca quemaduras en las puntas de las hojas. Cuidado con las aguas de pozo que a veces son salitrosas. Lo ideal es tener un análisis de agua hecho en laboratorio para conocer sus propiedades químicas.
Algunos suelos son salinos y el efecto es el mismo: quemaduras. Más sobre salinidad, aquí.
15. Problemas de siembra
En los Céspedes recién sembrados, con las plantitas acabadas de nacer, a veces se ven zonas marchitas, con un color oscuro y podridas. Esto lo pueden provocar hongos como el Pythium spp., Rhizoctonia spp. o Fusarium spp., pero también falla la siembra de césped por otras razones:
- Semillas viejas que han perdido su poder germinativo.
- Falta de agua. Tras sembrar se debe regar a diario, ideal 2 ó 3 veces al día.
- Semilla enterrada demasiado profunda.
- Pájaros y hormigas que se las llevan.
- Exceso de fertilizantes de fondo (en la preparación del terreno).
- Si usas un estiércol para mejorar el suelo, debe estar bien fermentado y mezclado bien con la tierra para que el contacto directo con las raíces no las 'queme'.
-
Suelo frío: con temperaturas
bajas no hay germinación.
No siembres en los momentos
de más frío
o de más calor del
año, es decir, ni en
invierno ni en pleno verano.