Cultivo de planta de interior

 

Luz, Humedad, Riego, Abono, Aireación, Despuntes, Limpieza, Abrillantador, Cambio de maceta, Problemas


  1. Las Plantas de interior de reciente adquisición o que te regalen puede que contengan insectos u hongos, inspecciónalas bien o aíslalas un tiempo del resto.

  2. Hay plantas de interior venenosas si se ingieren. Ejemplos: Alocasia, Diefenbaquia, Flor de Pascua, etc.


  3. Luz

    Si la luz es escasa, coloca cerca un foco de luz artificial, pero a no menos de 30-40 cm. Pon espejos detrás de las plantas que aumentan la luminosidad. Las paredes pintadas de blanco y los muebles claros también proporcionan más luminosidad interior.

    Si el invierno ha sido muy oscuro, es decir, poco sol, muchos días nublados, las plantas de hoja y las plantas con flor pueden necesitar de luz artificial para suplir la falta de luz solar.

    Junto a la ventana

    Las plantas que necesiten más luz sitúalas cerca de las ventanas, pero sin corrientes de aire.

    Gira las plantas de interior para que todos sus lados reciban luz y crezcan de forma equilibrada.



    Acérca las cestas colgantes a las ventanas, evitando el sol directo. Ejemplos: Poto, Ceropegia, Cinta...

  4. Humedad

    Pulveriza las plantas de interior con cierta regularidad. De este modo, añades humedad, mantienes las hojas limpias y previenes la aparición de ácaros (Araña roja).

    No pulverices las que tienen hojas con vello como Cuerno de alce, Saintpaulia o Begonia rex.

    No sirve para "refrescar" las plantas de interior el aire acondicionado.

  5. Riego

    Las plantas de interior necesitan más agua si están en habitaciones con calefacción.

    Cuando vayas a regar las plantas de interior, es recomendable utilizar un agua que esté a la misma temperatura del sustrato para no dañar las raíces. En invierno, si está muy fría, es recomendable dejar el agua en reposo al lado de la planta hasta que coja la misma temperatura, por ejemplo, pasando la noche ahí. Especialmente importante es en el caso de regar plantas tropicales.

    Si el agua de la llave sale con mucho cloro, para regar las plantas en maceta deja reposar por algunas horas o toda la noche.

  6. Abono

    Un uso abusivo de los fertilizantes puede quemar raíces y hojas e incluso provocar la muerte de la planta. Ajusta su alimentación al ritmo de crecimiento.

  7. Aireación

    Afloja la tierra más superficial de las macetas para que penetre bien tanto el agua como el oxígeno.

  8. Despuntes

    Cortar las puntas estimular el crecimiento de las hojas y hace que las hojas crezcan más grandes y espesas.

  9. Limpieza

    Quita las flores marchitas, las hojas o ramas muertas y las hojas que hayan amarilleado.

    El polvo en las hojas de las macetas impide que hagan bien la fotosíntesis.

    Límpialas con una esponja humedecida para plantas con hojas grandes y con un pulverizador en hojas pequeñas. Recuerda que las plantas respiran a través de los poros de sus hojas (estomas), por lo que deben estar libres de polvo. Además se evita la aparición de ácaros de araña (no le gusta el agua) y aumentar el nivel de humedad.

    Las de hojas peludas como Cuerno de alce o Saintpaulia, no hay que mojarlas sino limpiarlas con un pincel.



    Para quitar las manchas blancas producidas por el exceso de cal del agua de riego, mezcla una cucharada sopera de vinagre por cada litro de agua y pulveriza con ello las plantas del jardín, al menos una vez al mes. No mojes las flores.

  10. Abrillantador

    En lugar de usar los abrillantadores que venden en spray, vierte en un cuenco un poco de leche con otro tanto de cerveza y bate la mezcla. Aplica con una esponja en cada hoja y saca brillo. El resultado es estupendo.

  11. Cambio de maceta

    Si las raíces están congestionadas en la parte exterior del cepellón, es el momento de cambiar de maceta.

    Si tus plantas crecen poco renueva la tierra de la capa superior o cámbialas a una maceta un poco mayor. La primavera es la estación ideal para hacer los cambios de maceta.

  12. Problemas

    - Falta de luz
    - Riego excesivo
    - Humedad baja
    - Aire interior sobrecalentado
    - Corrientes de aire frío o de aire caliente. Tenlo presente cuando ventiles.


  13. Cuidado también con las plantas que tengas junto a las ventanas, porque sus hojas no deben estar en contacto con el cristal frío. En el caso de que estén muy próximas, protégelas por las noches con la cortina. Esto evidentemente sólo en el caso de que vivas en una zona en la que las heladas y las bajas temperaturas nocturnas sean habituales.

  14. El "exceso de interior" provoca un crecimiento débil y pérdida de verdor en Ficus, Yuca, Clivia o Croton. Lleva a la terraza, a la sombra o abre las ventanas y deja que respiren aire fresco.

  15. Busca esos lugares de la casa para poner temporalmente plantas que estén en problemas hasta que se recuperen. Por ejemplo, el cuarto de baño es un buen lugar por el calor y la humedad, eso sí, siempre que tenga una ventana que proporcione luz natural. Puede ser un sanatorio perfecto.




Plantas de interior