Luz y temperatura (cactus y crasas)
Luz
Las
Suculentas en general y los Cactus en particular precisan
un lugar con mucha luz, aunque el sol directo todo
el día podría provocar quemaduras en determinadas
especies más delicadas. Lo mejor es una posición
donde disfruten de sol una parte del día, al
menos unas 5 ó 6 horas de sol, de mañana
o de tarde.
Los
Cactus grandes toleran más sol que los pequeños,
pero incluso al alcanzar los 4-5 años conviene
que parte del día estén bajo una leve sombra.
Protege a las plantitas jóvenes.
Las
macetas de plástico oscuro se pueden sobrecalentar
con el sol y quemar las raíces del Cactus.
Lo mejor es tener macetas de colores blancos o pastel;
en caso de no tener otra opción recubre la maceta
por fuera con papel u otro material blanco grueso.
Temperatura
Cactus de Navidad (Zygocactus
truncatus)
no resiste el frío.
Dependerá
de las especies, pero en general, si la temperatura
baja de +5º C muchas Suculentas, sobre todo las
que provienen de zonas tropicales, pueden morir.
Los Cactus son más resistentes porque en su hábitat
natural desértico, por las noches, las temperaturas
alcanzan algunos grados bajo cero.
Cuando
el termómetro baje de 10º-15º C es
muy importante conservar el substrato de las macetas
totalmente seco. Por tanto, si tienes Cactus en
macetas en el jardín, es aconsejable disponer
de un sitio que no se mojen con la lluvia, una zona
cubierta con algún material traslúcido
como un techo de plástico, y proteger así
a aquellas plantas que en invierno requieren un sustrato
completamente seco o no aguantan la conjunción
de frío y suelo húmedo. Además
el techo resguarda del frío, pero en climas con
heladas fuertes no será suficiente protección
y hay que meter dentro de casa o en un invernadero cerrado.
Las
plantas pueden estar fuera de abril a septiembre, cuando
ya no haya riesgo de heladas. Para el Centro y Norte
de la Península Ibérica conviene resguardar
todas las especies en algún lugar donde no estén
sometidos a las inclemencias invernales. Para las zonas
costeras del Mediterráneo tan sólo habrán
de protegerse aquellas especies más delicadas,
aunque muchas otras crecerán más saludables
si se las cultiva en invernaderos.
Invernada
Chamaecereus silvestrii
Por otro lado, para garantizar la floración
de los Cactus, conviene dejar la planta en estado de reposo
durante el invierno, reduciendo al mínimo los aportes
de agua y nada de abono. Hazlas invernar dentro de
casa en un sitio fresco y luminoso como el dormitorio.
Por ejemplo, la pequeña Chamaecereus silvestrii
sólo florecerá si ha soportado un golpe
de frío durante el invierno.
Las plantas que invernan al fresco o en semioscuridad
no deben regarse en absoluto, porque se pueden pudrir.
Al contrario, las plantas que invernan con calor (15
a 20ºC) en un apartamento o en un invernadero siguen
creciendo y hay que regarlas moderadamente (2 ó
3 veces por mes, pero sin abono).
Una
vez terminado el reposo, evita sacar las plantas de
golpe al sol tras pasar el invierno a cubierto.
Si ha estado en penumbra corre el riesgo de quemaduras
irreversibles. Finalmente, no debes retomar la fertilización
hasta que la vegetación no se haya reiniciado
por completo, es decir, avanzada la primavera. Como
digo, es necesario acostumbrar a los vegetales al sol
al principio del período vegetativo.
¿Dónde
ubicar las Suculentas?
En
un piso, las Crasas deberán colocarse cerca de
una ventana, incluso en su alféizar. Agave, Yucca,
Nolina, Opuntia, Cereus, etc., de grandes dimensiones
se utilizan para la decoración de pasillos o
de rellanos de escalera, mejor que estén colocadas
en el exterior al menos durante una parte del verano,
de manera que se permita a sus brotes marchitos rehacerse
al aire libre.
Si el lugar donde están los Cactus es una ventana
muy soleada, se puede cubrir ésta con papel blanco,
semitransparente, con una malla o bajar la persiana. El
cristal no filtra los rayos ultravioleta, muy dañinos,
y pueden quemar la epidermis de la planta.
Un
patio o una terraza son sitios muy buenos para tener
Cactus y otras Suculentas.
Otro
lugar posible es un invernadero. Con ellos se consiguen
unas temperaturas y condiciones de cultivo más
favorables.
Los
hay a la venta en kits para montarlos uno mismo. Es
recomendable equipar el invernadero con un medio
de calefacción (conexión con la calefacción
central, calefacción autónoma a gas, calefacción
eléctrica, por fueloil...). De este modo se previenen
los accidentes que podrían resultar de un cambio
brusco de temperatura. Es igualmente importante proporcionar
un medio de ventilación si no quieres
ver a las plantas achicharrarse los días de mucho
sol. Por ejemplo instalando un ventilador que proporcione
una circulación de aire permanente (aparte de
abrir y cerrar ventanas).