Acolchado o 'mulching'
- El acolchado consiste en cubrir el suelo al pie de las plantas con una capa de 5 a 10 cm de espesor de diferentes materiales: paja, cortezas de pino, mantillo, hojas, gravas, plásticos, etc.
- El acolchado es una de las bases de la jardinería de poco riego. Ahorra trabajo: menos riego, menos hierbas y no hay que labrar el suelo.
- Tradicionalmente los hortelanos han cubierto con paja el terreno donde se asientan las verduras y hortalizas con el fin de impedir la evaporación del agua del suelo y la presencia de malas hierbas a su alrededor.
- ¿Momento para aplicarlos? Ideal en primavera y principios de verano.
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¿Qué
beneficios proporciona
el acolchado?
- Reduce la pérdida de agua.
- Produce humus al descomponerse con los años (caso de mulching orgánicos).
- Mejora la estructura del suelo.
- No es necesario labrar porque el suelo está cubierto.
- Impide que salgan malas hierbas (cuanto más espesor, menos salen).
- Puede ser ornamental.
- Protege las raíces superficiales de los daños de cultivo y del frío.
- La tierra absorbe mejor la lluvia porque se evita la formación de costra.
- Activa y alimenta a los microorganismos del suelo. - ¿Qué materiales se pueden usar?
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Cortezas
de pino trituradas
Muy buen material de mulching y mejor aún los tamaños pequeños que los trozos grandes. Decorativo. -
Acículas
de pino, paja
Conserva bien el agua del suelo. Es inflamable, se descompone rápidamente y adquiere una coloración grisácea con el tiempo, por lo que necesita ser reemplazado al menos una vez al año. También se han descrito problemas relacionados con deficiencia de Nitrógeno o problemas de caracoles o babosas cuando el mulching está muy húmedo e incluso de roedores. -
Turba,
mantillo, compost,
estiércol
descompuesto
y rico en paja
Son materiales que se descomponen con facilidad y no siempre evitan los problemas de malas hierbas. -
Hojas,
recortes de
césped
secos
Posee un aspecto menos estético que los materiales anteriores.
Con los restos de hierbas precaución por el elevado contenido de semillas de malas hierbas que pueda contener.
El grosor de la capa de acolchado no debe ser excesivo, sobre todo si se trata de material verde, ya que podría compactarse y dificultar la oxigenación del suelo. -
Gravas
y guijarros,
áridos
de colores,
puzolana volcánica
Son decorativos. Hay grava blanca, verde, rosa, roja, marmolina blanca, etc. Cactus y suculentas aprecian el calor que reflejan. -
Serrín
y astillas
No se recomiendan materiales derivados de la madera como serrín y cortezas pulverizadas o astilladas, salvo que tengan 2 años de antigüedad, porque la descomposición en el suelo absorbe el nitrógeno del suelo quedando no disponible para las plantas, lo cual produce una depresión en el cultivo. Se podría compensar si se aporta un fertilizante mineral nitrogenado hasta que los microorganismos liberen el Nitrógeno que han "inmovilizado" temporalmente en su ataque a las materias secas.
Las virutas y demás restos de serrerías no deben contener productos químicos protectores de la madera, e igualmente, no deben proceder de maderas de coniferas, ricas en fenoles taninos, que retrasan mucho la humificación.
Si se dispone de gran cantidad de estos materiales (piña, corteza de pino, cáscara de piñón, etc.), es preferible compostar en montón, haciendo pruebas previas mezclando en distintas proporciones con otros materiales, como paja de cereales y vegetales verdes. -
Acolchado
con plásticos
Se emplean en horticultura. El plástico puede ser blanco, negro o transparente.
- Mantiene la humedad del suelo.
- Aumenta la temperatura del suelo y acelera la cosecha.
- Permite adelantar la siembra y que la germinación sea rápida.
- Refleja calor hacia la fruta para madurar.
- Se conservan las hortalizas limpias y libres de salpicaduras.
- Mejora la calidad del fruto al impedir el contacto con el suelo.
- Los negros impiden que salgan malas hierbas.
- Los blancos se emplean para reflejar la luz y calor sobre frutas en maduración como tomates y melones.
- Los transparentes se emplean para calentar el suelo en primavera o evitar salpicaduras.
Se utilizan para acolchado láminas de polietileno de 80-150 galgas de espesor. Duran 1 campaña.
También existen nuevos acolchados biodegradables ("bioplástico"). La colocación en terreno es similar al acolchado de polietileno y proporciona similares resultados agrónomos. Una ventaja muy importante es que este producto suda.