
Poda
de rosal arbustivo

Rosal
arbustivo 'Pink Grootendorst'
La
poda para éstos es mínima. El primer año
nada y en los siguientes basta con controlar lo que
sobresale del macizo recortando ligeramente y reducir
el volumen del arbusto, si es excesivo, cada 3 ó
4 años.
Elimina ramas secas y demasiado débiles.
Rosal
arbustivo
Poda
de reducción cada varios años
GENERALIDADES
SOBRE LA PODA DE ROSALES
Epoca de poda. Como todos los tipos, los rosales
deben podarse en invierno. En climas suaves,
puede hacerse en pleno invierno, pero en zonas más
frías, con heladas intensas, es mejor a finales
del invierno cuando ya el frío es menor (en España,
febrero-marzo) .
Elimina ramas secas, muertas, dañadas o enfermas.
Para saber si una rama está muerta, la superficie
que se ve tras el corte del tallo es de color marrón;
si está viva es de color blanco.
Eliminar chupones
que brotan del portainjerto. Por debajo del punto
donde se injertó la variedad está el portainjerto
o patrón. Pues bien, del patrón o portainjerto,
es frecuente que salgan brotes, los cuales no sirven
para nada porque no dan flores y consumen agua y nutrientes.
Se reconocen porque las hojas son verde claro y son
más pequeñas. Elimínalos desde
la inserción.
Elimina flores marchitas y frutos. Las flores
que ya se han pasado afean al arbusto y le consumen
energías para formar el fruto (llamado en Rosal
escaramujo). Las
flores pasadas se deben eliminar cortando por debajo
de la segunda hoja a partir de la flor.
Los cortes siempre deben hacerse limpios, con
herramientas perfectamente afiladas, y un poquito por
encima de una yema (1 cm.).